Escala y contexto

Un objeto, o lo que queda de él: un poste a medias, una roca en un camellón cuya función ya no es ninguna. Me llama la atención, por su forma, su color, su textura, su tamaño, su localización, pero sobre todo por su potencial, por lo menos, en la imaginación.
Pienso en la fuerza que tiene un objeto, una cosa, según esto último: tamaño y localización, escala y contexto.
¿Qué pasaría si esta misma roca -así vamos a llamarla-, la colocamos en una galería? ¿Qué pasa si una misma cosa la descontextualizamos, gana o pierde fuerza, se convierte en otra cosa, en este caso, incluso, en una obra de arte?
¿Qué pasa si cambiamos su escala, si la hacemos más grande, mucho más grande y la colocamos en el campo, como un mineral atrapado en el paisaje? El objeto cambia, se vuelve geografía.
¿Qué pasa, ahora, si a esta roca le colocamos el poste que le falta y le regresamos su función, su razón de ser; dónde es más necesaria, en el campo, en la galería o en la ciudad, donde pertenece?


